14/10/08


"Puede decirse, por lo tanto, que lo que hace más comprensible el proyecto fundamental de la realidad humana es que el hombre es el ser que proyecta ser Dios. Cualesquiera que sean después los mitos y los ritos de la religión que se considere, Dios es, ante todo, sensible al corazón del hombre como lo que le anuncia y le define su proyecto último y fundamental. Y si el hombre posee una comprensión preontológica del ser de Dios, no son ni los grandes espectáculos de la naturaleza ni el poder de la sociedad quienes se le han conferido, sino que Dios, valor y objetivo supremo de la trascendencia, representa el límite permanente a partir del cual el hombre se hace anunciar lo que es. Ser hombre es tender a ser Dios; o, si se prefiere, el hombre es fundamentalmente deseo de ser Dios."
Sartre, El Ser y la Nada.

Si en este pasaje se sustituye el ser Dios por ver a Dios, la coincidencia con la teología cristiana sería perfecta.

No hay comentarios: